Cryo ROP Study:
El Cryo ROP Study fue el primer estudio multicéntrico randomizado que demostró la utilidad del tratamiento de la retinopatía del prematuro y que determinó el momento de hacerlo, definiendo la retinopatía "Umbral". Anteriormente a este estudio la retinopatía del prematuro era tratada en múltiples centros con crioterapia e incluso con láser Xenon, pero no había datos que demostraran su eficacia y seguridad.

En el Cryo-ROP se incluyó pacientes cuyo peso de nacimiento fuera inferior a 1251 gramos, siendo examinados por primera vez entre las 4 y las 6 semanas de edad cronológica y luego cada 2 semanas hasta que los RN alcanzaran una enfermedad “preumbral” (cualquier ROP en Zona I, Zona II: ROP etapa 2 con PLUS o Etapa 3). Desde entonces los exámenes eran repetidos semanalmente hasta alcanzar el Umbral. Se definió como nivel umbral aquel en que existía un 50% de riesgo de ceguera por progresión de la enfermedad. Clínicamente el Umbral fue definido como 5 o más horas continuas u 8 horas acumuladas de enfermedad 3 plus, usando la Clasificación Internacional de la Retinopatía del Prematuro (ICROP).

 

Cuando el RN desarrollaba una enfermedad Umbral bilateral un ojo era randomizado a tratamiento y el otro como control. Cuando la enfermedad era unilateral el ojo con ROP podía ser randomizado a tratamiento o a control. Una vez hecho el diagnóstico la crioterapia era llevada a acabo dentro de las 72 horas siguientes. Para la evaluación de los resultados se utilizó el examen clínico y la fotografía de fondo de ojo de estos pacientes. Se consideró como un resultado anatómico desfavorable la presencia de un pliegue retinal que comprometiera la mácula (Foto A), un desprendimiento retinal que comprometiera la mácula (Foto B) o la presencia de tejido retrolental que impidiera la visualización del fondo de ojo (Foto C).

Foto A

Foto B

Foto C

Entre Enero de 1986 y Octubre de 1987, 3.862 niños cumplieron los requisitos para la randomización y 291 fueron randomizados. De ellos el 82% desarrolló una ROP simétrica y fueron tratados en promedio a las 11.4 semanas de edad cronológica (6.7 SEM - 23.9 SEM). Un 6.2% requirió retratamiento. El 7.6% de los ojos tratados correspondió a ROP en Zona I y un 5.9% de los controles.

El CRYO-ROP Study demostró que la aplicación de crioterapia a los ojos con enfermedad umbral lograba reducir en un 49.3% aproximadamente la posibilidad de un resultado anatómico desfavorable (31.1% desfavorables en los tratados versus un 51.4% desfavorable en los controles) a los tres meses (3, 22).
Demostró además que la crioterapia no solamente permitía un resultado anatómico favorable, sino también un resultado funcional favorable si se la comparaba los ojos tratados con los ojos controles al año de seguimiento. Con un 35.0% de resultados funcionales desfavorables en ojos tratados versus 56.3% ojos controles (23).

A los tres años y medio de seguimiento se confirmó el efecto benéfico de la crioterapia en los pacientes tratados tanto en el aspecto anatómico como funcional, sin embargo, mostró que el resultado funcional no necesariamente era una función normal (28).

A los 5 ½ años se confirmó el efecto benéfico de la aplicación de crioterapia para la prevención de ceguera y un resultado anatómico desfavorable, sin embargo se planteó que la aplicación de crioterapia tendría asociado una disminución de la agudeza visual mejor corregida en ojos con enfermedad umbral (rango 20/200-20/60). Sólo el 13% de los tratados versus 17% de los controles lograron AV 20/40 o mejor (29).

A los 10 años de la randomización estas diferencias no fueron confirmadas, sin embargo aún un 44.4% de los ojos tratados presentaba AV 20/200 o peor, y aquellos que tenían una AV 20/200 o mejor sólo el 45.4% tenía una AV 20/40 o mejor, lo que reflejaba no sólo la severidad de la ROP al momento de la randomización sino también factores neurológicos que podían comprometer la función visual. El único efecto adverso demostrable en los pacientes tratados con crioterapia era la reducción del campo visual (30-31).

Desde la publicación de los primeros resultados del CRYO-ROP se estandarizó la aplicación de crioterapia en los RN prematuros con ROP. Pero aún existía un 25% de pacientes con resultados desfavorables pese a la aplicación de crioterapia. Aquellos pacientes portadores de ROP en Zona I se beneficiaban del tratamiento con crioterapia, pero los efectos de esta eran mucho menos satisfactorios que para aquellos pacientes que desarrollaban ROP en Zona II (94% resultado desfavorable sin crioterapia vs 78% de resultados desfavorables con crioterapia, en Zona I).

Cuando se definió la enfermedad "Umbral" y se determinó que este era el momento más adecuado para aplicar el tratamiento, se hizo en base a una estimación clínica. En la actualidad sabemos que esta fue bastante acertada para aquellos pacientes que cursaban con una retinopatía “UMBRAL” en zona II, en los cuales existiría un 62% de riesgo de una evolución anatómica desfavorable si no eran tratados en este punto de la evolución de la enfermedad. Sin embargo, esto no era homologable a lo que ocurría en zona I donde al usar estos criterios el riesgo de un resultado desfavorable era cercano a un 90%.

En la actualidad los criterios de tratamiento se han modificado. Por lo tanto, cuando nos referimos al término de “UMBRAL” nos estamos refiriendo al término acuñado por el Cryo-ROP Study y que ya no representa los criterios usados en la actualidad para indicar el tratamiento.

Los avances en la ciencia oftalmológica, junto a la necesidad de ofrecer mejores alternativas terapéuticas a estos pacientes hizo que paulatinamente la crioterapia fuera dejada en un segundo plano por la fotocoagulación con láser que demostró ser incluso más efectiva que la crioterapia e igualmente segura, ofreciendo a estos pacientes un mejor pronóstico (39).

 El BEAT-ROP study, cuyo nombre completo y referencia es Efficacy of Intravitreal Bevacizumab for Stage 3+ Retinopathy of Prematurity

(Helen A. Mintz-Hittner, M.D., Kathleen A. Kennedy, M.D., M.P.H., and Alice Z. Chuang, Ph.D. for the BEAT-ROP Cooperative Group

N Engl J Med 2011; 364:603-615February 17, 2011)

 

Este estudio fue de tipo prospectivo y randomizado analizó el uso del bevacizumab (Avastin) como tratamiento para la ROP en zona I y zona II posterior etapa 3+.

Los prematuros se randomizaron para ser tratados con bevacizumab o láser (terapia convencional).

El resultado se evaluó por la recurrencia de ROP antes de las 54 semanas.

 

Se reclutaron 150 prematuros y los resultados principales mostraron un recurrencia de del 4% en grupo tratado con bevacizumab versus un 22% en el grupo tratado con láser , lo que fue estadísticamente significativo. El efecto del tratamiento se demostró para zona I y no para zona II.

 

Se concluyó que el tratamiento con monoterapia con bevacizumab era más beneficioso que el tratamiento con láser para ROP en zona 1.